Muchos no se dan cuenta del punto de inflexión letal que fue para la Iglesia la aceptación del laicismo liberal masónico con DH del II Concilio Vaticano.
La iglesia aceptó la demanda del Sistema, del Mundo, del Leviatán, del César, de darle a él las cosas de Dios.
Esta abdicación histórica tiene responsables.
Algunos quedan vivos; si hablan algo, tendría que ser para pedir perdón y dar explicaciones por esto con lágrimas y en saco y ceniza.
Esa inflexión a partir de 1962 resquebrajó la continuidad bimilenaria de la Santa Iglesia, con la aceptación de DIGNITATES HUMANAE por parte de todos los pistconciliarea se entregó a las fauces del liberalismo masónico la rendición de la única Sacro Santa Institución que resistía, denunciaba y combatía de frente a esos poderes terrenales , a el sistema diseñado para erigirse como el Leviatán implacable .
ResponderEliminarNo hay forma ya de reparar ese daño a la verdadera Iglesia de Cristo hoy atravesando su pasión, su pascua.
Arrepiéntanse los destructores, Benedicto XVI, TU ERES CULPABLE , junto con los Papas Conciliares fallecidos.
Bergoglio, la Justicia de Dios te alcanzará si no te arrepientes junto con toda esa iglesia conciliar Apóstata que te aplaude. El Alien surgido de ese II CV novus ordo conciliar herético y réprobo.