El Espíritu del Concilio....
Esa extraña entelequia humeante que parece haber subido desde el mismo averno y se metió dentro de la iglesia como un metamagisterio inexplicable...
De donde viene?
De donde va a venir? No seamos estúpidos...
Viene de los Textos del Concilio; si DE LOS TEXTOS...
El Discurso de Inicio ya contiene el germen de toda disolución: la abdicación de la potestad correctiva hacia adentro y hacia afuera; no se reprimirán los errores -porque ha llegado la Era de la Misericordia, nuevos vientos soplan- y no se quiere ser profetas de desgracia....
Los hombres -dice- tienden a darse cuenta solos de los errores graves -Pelagio ha revivido!
El liberalismo laicista liberal masónico de Tercer Grado de Dignitates Humanae, libertad religiosa negativa condenada con anticipación y asombrosa exactitud y explicitud, puso a la Iglesia bajo la bota del César y subsumida y presionada bajo sus normativas ideológicas anticristianas; abdicando a la instauración del Reino social de Cristo en la tierra, devolviéndole el mundo al Enemigo; confinando a la Fe a la privacidad de los corazones y expulsándola de la vida pública de las naciones. A partir de aquí la Iglesia queda bajo la presión de toda influencia maligna en el plano de las ideas y normativo...
El naturalismo indiferentista de Nostra Aetate reniega y abdica del central Dogma Extra Ecclesiam Nulla Salus, apuntando al relativismo y a la suficiencia natural de las religiones adámicas para encontrar la verdad ...
La Nueva eclesiología de Lumen Gentium refuerza esa abdicación de la Iglesia Católica como único Arca de la Salvación...democratismo....relativización de la Verdad Absoluta...
La Reforma Litúrgica infausta, ya condenada bajo anatema por San Pío V al instaurar para siempre la Misa Católica, vacía la Misa de contenido sacrificial, separa el Tabernáculo del Altar, hace mirar cura y pueblo entre sí, cambia las fórmulas y oraciones y la convierte en una celebración inmanente, humama, protestante, naturalista, antropocéntrica,....
La Colegialidad, contribuye a dar a todos los Obispos un poder que contrarresta al del Papa.....quizás para evitar que en el fututro un Papa Católico pudiera tomar medidas de restauración ...
El humanismo prometeico y naturalista, personalista de Gaudium et Spes....parece un panfleto de milenarismo humanista que apunta al Punto Omega y al progreso indefinito púramente inmanente....mezclado con afirmaciones católicas inconexas...
De donde va a venir el Espíritu del Concilio?
Viene de sus textos erróneos! De donde va a venir, por favor!
Seamos adultos. Seamos católicos. Seamos racionales.
La pretensión de que esa malvada entelequia venenosa arruinó los textos impolutos, o meramente ambiguos del Concilio, originándose por el periodismo y los mass media, es para tontos recalcados.
El Espíritu del Concilio proviene de sus mismos textos, con el empuje, naturalmente, de la jerarquía conspiradora elegida de acuerdo a la nueva dirección de la iglesia que brota de sus textos. Y el aprovechamiento de las bombas de tiempo de las ambigüedades contenidas en ellas, que serán explotadas hasta el infinito para sacar las peores interpretaciones.
Salgamos del relato folklórico y legalista muerto, o seudopiadoso neoconservador que oculta la verdad.
El problema del II Concilio Vaticano está en sus textos primariamente.
miren la fotito, todos tan sonrientes, se nos ríen en la cara... sonrisas, falsas cínicas...
ResponderEliminarel espíritu... ¿y la hermenéutica de la "confiabilidad"?? otro tanto jaja
ResponderEliminarAsi es, ese era el pensamiento naturalista de roncalli, que decía que todo se arreglaba por la misma fuerza del bien sin que ellos como segundas causas tuvieran que intervenir. Tremendo hereje.
ResponderEliminarSi hasta a un santo como san Antonio a veces le costaba que la gente le prestara atención con sus hermosas predicaciones, imagínense si encima los obispos claudican de su misión de defender la Fe y predicar, entonces no queda nada, el tsunami del mundo entra en la iglesia a sus anchas y arruina todo lo que toca sin la resistencia debida de quienes tienen como misión oponerse a la ruina de las almas.
El Papa Pío IX, en su encíclica “Singulari Quadam” (diciembre 9 de 1854), expresó la necesidad que tiene el hombre de tener a la religión verdadera para guiarlo y a la divina gracia para fortalecerlo:
Eliminar“Puesto que es cierto que la luz de la razón se ha oscurecido, y que la raza humana ha caído miserablemente de su antiguo estado de justicia e inocencia a causa del pecado original, el cual se comunica a todos los descendientes de Adán, ¿puede todavía alguien pensar en la razón pura como suficiente para la consecución de la verdad? Si alguien ha de evitar resbalar y caer en medio de tan grandes peligros, ¿puede, en vista de tal debilidad, atreverse a negar la necesidad de la religión y la gracia divina para la salvación?”.
https://www.obispoenmisiones.com/los-grandes-danos-del-liberalismo-religioso/
“Puesto que es cierto que la luz de la razón se ha oscurecido, y que la raza humana ha caído miserablemente de su antiguo estado de justicia e inocencia a causa del pecado original, el cual se comunica a todos los descendientes de Adán, ¿puede todavía alguien pensar en la razón pura como suficiente para la consecución de la verdad? Si alguien ha de evitar resbalar y caer en medio de tan grandes peligros, ¿puede, en vista de tal debilidad, atreverse a negar la necesidad de la religión y la gracia divina para la salvación?”.
https://www.obispoenmisiones.com/los-grandes-danos-del-liberalismo-religioso/
ResponderEliminarEn gran parte la responsable de la situación actual que hoy nos ha tocado vivir de falta de valores, violencia, barbarie y de crímenes tan atroces, como son los abortos donde las madres asesinan a sus propios hijos en su vientre, hijos matando y descuartizando a sus padres, infantes violados y asesinados. Es debido al controvertido y liberal decreto de la “Dignitates Humane” del Pablo VI, base del Liberalismo Religioso que tanto daño esta causando no sólo al cristianismo sino a la humanidad entera.
Los sencillos fieles infestados de esta herejía desde las década de los 1960. Han sido orillados a abrigar una muy vaga idea acerca de lo que es la verdadera fe católica, y gradualmente han ido engendrando actitudes como éstas, llegando a decir: Una religión puede ser tan buena como otra; no importa lo que uno crea con tal de que sea buena persona.
A este espíritu se le ha llamado “liberalismo religioso” y este fue adquiriendo poco a poco mayor intensidad mediante los matrimonios mixtos, la unión libre, los divorcios, y el pertenecer los católicos a sociedades acatólicas y partidos de izquierda, y a las reuniones tolerantes con los protestantes mal llamados (hermanos separados) y otros más.
Ahora bien, ¿qué posición debe de tomar todo buen católico con relación a esta actitud después de examinar a la luz de la Revelación cristiana y de la sana razón?
Si una religión están buena como la otra, ¿porqué entonces Dios tomó nuestra carne? ¿porqué vivió El treinta y tres años en medio de los hombres pecadores? ¿Para qué se tomó el trabajo de comunicarnos su mensaje religioso? ¿Por qué no había de bastar la religión judaica, o la romana, o la griega?