Juan Donnet
XXVI DOMINGO DESPUÉS DE PENTECOSTÉS
(VI DOMINGO DESPUES DE EPIFANÍA transferido)
II Clase, Verde
Gloria, Credo y prefacio de la Trinidad
TEXTOS DE LA MISA
INTROITO . Jer. 29, 11, 12 y 14. –
Dice el Señor: Yo tengo designios de paz sobre vosotros, y no de aflicción; me invocaréis y Yo os escucharé; os haré volver del cautiverio y os reuniré de todos los lugares adonde os había desterrado. Salmo. 84, 2.- Habéis bendecido, Señor, vuestra tierra; habéis acabado con el cautiverio de Jacob. Gloria al Padre…
COLECTA
Concédenos, te rogamos, oh Dios omnipotente, que pensando siempre propósitos rectos, cumplamos de palabra y de obra lo que a ti te agrada. Por nuestro Señor.
EPISTOLA
Tes. 1, 2-10.- El haber sido objeto de la elección divina nos debe llenar de gozo y de una apacible confianza en la espera de la venida en gloria de nuestro Señor Jesucristo.
Hermanos: Siempre damos gracias a Dios por todos ustedes, cuando los recordamos en nuestras oraciones, y sin cesar tenemos presente delante de Dios, nuestro Padre, cómo ustedes han manifestado su fe con obras, su amor con fatigas y su esperanza en nuestro Señor Jesucristo con una firme constancia. Sabemos, hermanos amados por Dios, que ustedes han sido elegidos. Porque la Buena Noticia que les hemos anunciado llegó hasta ustedes, no solamente con palabras, sino acompañada de poder, de la acción del Espíritu Santo y de toda clase de dones. Ya saben cómo procedimos cuando estuvimos allí al servicio de ustedes. Y ustedes, a su vez, imitaron nuestro ejemplo y el del Señor, recibiendo la Palabra en medio de muchas dificultades, con la alegría que da el Espíritu Santo. Así llegaron a ser un modelo para todos los creyentes de Macedonia y Acaya. En efecto, de allí partió la Palabra del Señor, que no sólo resonó en Macedonia y Acaya: en todas partes se ha difundido la fe que ustedes tienen en Dios, de manera que no es necesario hablar de esto. Ellos mismos cuentan cómo ustedes me han recibido y cómo se convirtieron a Dios, abandonando los ídolos para servir al Dios vivo y verdadero, y esperar a su Hijo, que vendrá desde el cielo: Jesús, a quien él resucitó y que nos libra de la ira venidera.
GRADUAL Sal. 43, 8-9. –
Nos salvaste, Señor, de nuestros enemigos, humillaste a los que nos aborrecen. Todos los días nos gloriamos en el Señor, siempre damos gracias a tu nombre.
Aleluya. Sal. 129,1.- Aleluya, aleluya. Desde lo hondo a ti grito, Señor; Señor, escucha mi voz. Aleluya.
EVANGELIO Mat. 13.31-35.-
En aquel tiempo: Dijo Jesús a las turbas esta parábola: «El Reino de los Cielos se parece a un grano de mostaza que un hombre sembró en su campo. En realidad, esta es la más pequeña de las semillas, pero cuando crece es la más grande de las hortalizas y se convierte en un arbusto, de tal manera que los pájaros del cielo van a cobijarse en sus ramas». Después les dijo esta otra parábola: «El Reino de los Cielos se parece a un poco de levadura que una mujer mezcla con gran cantidad de harina, hasta que fermenta toda la masa». Todo esto lo decía Jesús a la muchedumbre por medio de parábolas, y no les hablaba sin parábolas, para que se cumpliera lo anunciado por el Profeta: Hablaré en parábolas, anunciaré cosas que estaban ocultas desde la creación del mundo..—Credo.
OFERTORIO Ps. 129, 1-2. –
Desde lo más íntimo de mi corazón clamé a Vos, oh señor; oíd benignamente mis oraciones, Dios mío; porque a Vos llamé desde lo más íntimo, Señor.
SECRETA
Esta oblación, oh Dios, nos purifique, nos renueve, diriga y proteja. Por nuestro Señor.
PREFACIO DE LA SANTÍSIMA TRINIDAD
En verdad es digno y justo, equitativo y saludable, darte gracias en todo tiempo y lugar, Señor, santo Padre, omnipotente y eterno Dios, que con tu unigénito Hijo y con el Espíritu Santo eres un solo Dios, un solo Señor, no en la individualidad de una sola persona, sino en la trinidad de una sola sustancia. Por lo cual, cuanto nos has revelado de tu gloria, lo creemos también de tu Hijo y del Espíritu Santo, sin diferencia ni distinción. De suerte, que confesando una verdadera y eterna Divinidad, adoramos la propiedad en las personas, la unidad en la esencia, y la igualdad en la majestad, la cual alaban los Ángeles y los Arcángeles, los Querubines, que no cesan de cantar a diario, diciendo a una voz.
COMUNION Marc. 11, 24. –
En verdad os aseguro que cuantas cosas pidiereis en la oración, tened viva fe de conseguirlas y se os concederán.
POSCOMUNIÓN
Alimentados con las delicias celestiales, te regamos, Señor, que siempre apetezcamos este alimento con que verderamente vivimos. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo.
COMENTARIO
Reino de los Cielos ya habíamos dicho que es la nueva economía de Dios con los hombres en Cristo; El Evangelio y su predicación.
Un grano de mostaza….es un grano pequeño, que cuando crece se convierte en un arbusto donde los pájaros hacen sus nidos y se guarecen.
El Reino empezó pequeño, con Cristo y luego doce apóstoles, luego setenta y dos discípulos y así se fue ampliando en ondas concéntricas…Primero se predicó en Israel, dada la incredulidad de los judíos se extendió a los paganos y casi todo el mundo pudo conocer el Reino de Dios.
La predicación empezó en un punto en el espacio y el tiempo con la Palabra de Cristo…
Ese grano también es la Palabra de Dios que trae la Verdad de Cristo al mundo: es el Evangelio.
Ciertas variedades de la mostaza se han usado como antídotos para venenos de serpientes y arañas.
Venenos de serpientes y arañas: el error, la herejía, las doctrinas y cosmovisiones falsas que desorientan la existencia humana.
Empezó como una pequeña plantita; luego creció hasta ser un arbusto en el que pájaros se acogen; descansan en la noche amenazante y se protegen del sol inclemente…. Hombres y comunidades que se acogen en las ramas de la Iglesia en las ramas que son distintas diócesis y naciones.
La Palabra de Dios verdadera viene desde la Eternidad, es Trascendente, no es un producto natural ni meramente humano. Si bien es mediatizada por palabra humana, al igual que el Reino, NO ES DE ESTE MUNDO.
La Biblia es antes que nada PALABRA DE DIOS.
Cuando se predica con integridad, interpretada por la Tradición, la Palabra hace su trabajo sobrenatural en las almas de los hombres y las sociedades.
Vemos los portentos de la Palabra de Dios en la predicación de San Pedro y San Pablo y los demás Apóstoles, como convirtieron y cristianizaron sociedades enteras. Y después de ellos santos predicadores que llevaron la Palabra a regiones lejanas. Galias, Bretaña, Centro de Europa, Rusia, México, Perú, Argentina, fueron lugares paganos que fueron convertidos en Cristiandad. Y otros lugares que si bien no fueron transformados a nivel social, si albergan núcleos cristianos fieles.
La Palabra fermentó y cambió sociedades enteras, para mencionar la segunda parábola. En esta no vamos a abundar, solo digamos que la Palabra, el Reino, si encuentra masa adecuada, fermenta toda la masa. Esto no quiere decir que todo el mundo se salve porque la Palabra cambiará absolutamente todo. Tiene el poder para eso, pero está el obstáculo de la libertad de los hombres que impide la fermentación benigna; la expansión del Reino. Esa masa que es fermentable por la Palabra también es el alma del hombre. Solo se santifica plenamente si el hombre aporta terreno fértil: el lo mismo que la semilla en la Parábola del Sembrador.
La Iglesia hasta 1962, con sus más y sus menos, sembró la semilla de la Palabra íntegra en una Misión heroica, santamente audaz, viril, agresiva, conquistadora, en el mejor sentido de la palabra. ¡Recordemos tantos santos y mártires que entregaron sus vidas para que la Palabra haga crecer el Arbusto de la Iglesia!
Con el II Concilio Vaticano, se descubrió (¡odiosas comillas!) que las religiones erróneas y falsas, poseían SEMILLAS DEL VERBO, gérmenes de Cristo que debían ser desarrollados. Y se dijo que este dichoso concepto provenía de los Santos Padres. Sí, en realidad el concepto provenía de los Santos Padres.
¡Pero no! Se entendió distinto a como lo entendieron los Santos Padres: Los Santos Padres atribuyeron los semina verbi a las culturas romana y griega, NO a las religiones paganas.
Ver acá
A una explicitación tergiversada y equivoca del asunto, siguió una interpretación peor.
Como un segundo desaliento de la predicación y la misión que esparce la semilla de mostaza por el mundo, el II Concilio, aunque no del todo explícitamente, se apropió del nefasto concepto del CRISTIANO ANÓNIMO de Karl Rhaner.
Según esto, todos los hombres sin excepción son Cristianos Anónimos, -es decir, Redimidos- porque la Redención de Cristo ya no viene de la Trascendencia, de la Eternidad de Dios-Totalmente-Otro, gratuitamente; sino que es intrínseca, inherente a la naturaleza humana. Una gratuidad obligada….Una atroz interpretación de la Gracia (o su supresión). La consecuencia de esto, es que no se necesita ni predicación, ni misión, ni Iglesia, ni Sacramentos, ni Fe, ni Cristo, ni Dios al final, porque todos los hombres son cristianos anónimos redimidos en cuanto a que son hombres. Crean o no, hagan obras o no, todos están redimidos a priori…
Como era de esperar, esto hizo caer el ímpetu misionero, la Predicación, la siembra de la semilla de mostaza; cayeron las vocaciones sacerdotales y religiosas, cayó la Fe en general. Si ya están todos salvados, para que joder y molestar a los happy bon sauvage (me permito esta promiscua mezcla de inglés y francés), que sean felices en su cultura, que Dios los acepta así.
¿Que aportó entonces para Rhaner la Predicación de la Iglesia, la Misión, si todos estaban ya salvados? Que tomaran conciencia de cristianos, de su salvación. Nada, al fin y al cabo mirado con objetividad y rigor.
Volvemos a decir; la consecuencia de esto es INDIFERENTISMO (todas las religiones son prácticamente igual de buenas; se pone en pie de igualdad la Verdad de Cristo con las religiones de los hombres). APOSTASÍA. ¡La Iglesia no se necesita! Además Rhaner lo ha dicho también de manera bastante explícita en ciertos lugares. La semilla de mostaza es prescindible
Por otro lado, como ya lo remarcamos los Domingos anteriores, el II Concilio Vaticano, con la Libertad Religiosa (Dignitatis Humanae) , RENUNCIÓ AL ESTABLECIMIENTO DEL REINADO SOCIAL DE CRISTO. ES DECIR, RENUNCIÓ A QUE EL MUNDO SE CONVIERTA EN EL ARBOL DE LA PARÁBOLA Y ALBERGUE A TODOS LOS HOMBRES EN SUS RAMAS.
El II Concilio Vaticano ACEPTÓ EL LAICISMO LIBERAL MASÓNICO y renunció a su misión principal. Aceptó el sometimiento al César; lo cual implica renunciar al crecimiento del Arbolito en el cual los pájaros se guarecen en sus ramas.
Es verdad que la misión siguió de cierta manera, pero en decadencia, cada vez mas exánime y sin ímpetu, como naturalmente no podía ser de otra manera.
Teología de Rhaner, Cristiano Anónimo, Germen del Verbo -mal entendido- y Libertad Religiosa, aniquilaron tanto la semilla de mostaza como el crecimiento del Arbusto.
INDIFERENTISMO, RELATIVISMO, LAICISMO, FE BUENISTA E INERME, PACIFISMO FAMÉLICO, son los resultados del cambio de rumbo; del AGGIORNAMIENTO.
¡Hemos llegado al nivel de claudicación inverosímil de que ya el Anuncio y la prédica exhortando a la conversión se llaman peyorativamente PROSELITISMO! Como si fueran una aberración.
Ahora se reemplaza el imperativo de Cristo de ID POR TODO EL MUNDO Y BAUTIZAD A TODOS LOS PUEBLOS EN NOMBRE DEL PADRE DEL HIJO Y DEL ESPÍRITU SANTO, ENSEÑÁNDOLES A GUARDAR TODO LO QUE LES HE MANDADO, por el DIÁLOGO; diálogo… cháchara chata, inmanente, horizontal, que interactúa a un mismo nivel con el error buscando un nefando y traidor contubernio pacífico….con la herejía y los dogmas del Leviathán, con la Corrección Política del Sistema, claudicando, ABANDONANDO LA ODIOSA VERDAD…..(comillas donde correspondan).
Como ya lo dijimos, el Establecimiento del Reino de Cristo en el Mundo no es un opcional para santazos (¡que palabra!…), para ciertos ultras (comillas) sino un imperativo para todo cristiano con Nombre. ¡No existen cristianos anónimos! Todo cristiano tiene para Cristo un nombre, y todo cristiano verdadero tiene Fe en Él.
¡Estamos actualmente en una iglesia que perdió virilidad, perdió ímpetu misionero; se avergüenza de la Verdad!
La gangrena pútrida progremodernista se ha metastizado y cada vez compromete mayores sectores de la estructura de la vieja iglesia católica. La Apostasía y su mortífero cortejo, el indiferentismo, el agnosticismo, el buenismo, el pacifismo, la cobardía, la falta de virilidad avanzan y se consuman en una genuflexión obscena ante el poder del mundo; ante el Leviathán; ante el César, como nunca se ha visto en la historia en este nivel cualitativo y cuantitativo.
Recobremos la Fe íntegra, la virilidad del Anuncio y la denuncia -que van juntos; recordemos a los grandes santos derribando ídolos a fuerza de garrote y hacha.
¡Recobremos el imperativo del Establecimiento del Reino sociopolitico de Cristo, aunque sea para retener lo que queda! Aquello de lo que el César no se ha apropiado todavía.
Resistamos el Sistema del Nuevo Orden Mundial que avanza como una aplanadora implacable.
Ese Nuevo Orden Mundial del cual la iglesia neoparadigmática de Francisco ha asumido pública y orgullosamente el Magisterio: el Plan de Desarrollo Sustentable de la ONU al 2030: nétamente anticristiano.
Se ha cambiado la semilla de mostaza, la semilla del Sembrador, por el germen del Diablo.
Pidamos a la Santísima Virgen discernimiento y fortaleza; refuerzo de las virtudes teologales y toda gracia necesaria para conservarnos fieles, y aunque sea a nivel personal y de pequeñas comunidades, cuidar abnegadamente lo que queda del maltrecho y seco arbolito; y seguir esparciendo la semilla de mostaza en el nivel que sea posible.
Sabemos que las puertas del Infierno no prevalecerán contra la Iglesia. La Iglesia, la verdadera, -el arbolito maltrecho con unas pocas ramitas con savia, donde unas pocas y lindas avecillas resisten; o mejor una pequeña plantita que no llega a ser arbusto, pero lozana y verde- Iglesia verdadera decíamos, la que resistió el Indiferentismo y la genuflexión ante el Leviatán del Anticristo, reducida a un Resto Fiel perseguido y contracorriente, recibirá al Señor al final en su Parusía en Gloria y Majestad.
Entonces el Arbol será Nuevos Cielos y Nueva Tierra eternos e inmarcesibles, donde habite la Justicia.
Y los que conspiraron y arruinaron la semilla de mostaza, los que pudrieron y secaron el arbusto, serán reducidos al lóbrego abismo por los siglos de los siglos.
SANTOS PADRES